Durante mucho tiempo he pensado que el mayor ingrediente que debe tener un autor para elaborar cualquier tipo de creación es una desbordante imaginación. Las fantasías que habitan en la mente de un escritor, siempre entendí que era la materia prima de cualquier creación. Después de más de una década de dedicación literaria me surgen muchas dudas sobre mi idea primigenia. Pues a día de hoy, a nivel editorial-comercial, se valora más una obra bien estructurada y con una correcta presentación y corrección, que una obra con buen argumento que presente algúna incorrección. Lo cual me abre la puerta a una inquietud aterradora: - O eres una persona con una formación académica que te permita escribir con corrección o nadie valorará el verdadero talento literario que fluya por tus venas. Me parece un completo error, pues un texto mal escrito tiene solución pero una obra sin argumento NO. A mi parecer, y aqui expongo mi opinión más personal, hay que apostar por el talento y darle a los escritores la formación, no pedir la formación antes que el talento. Sino caminaremos hacia una literatura acádemicamente perfecta pero insulsa e insustancial.
Tras unos días de descanso, celebrando mi cumpleaños y un intenso fin de semana de san valentín vuelvo con más información y noticias. Lo primero comentar que estoy trabajando en mi propio web site y eso me está robando más tiempo del que suelo tener para estos menesteres. Proximamente cuando la página esté realizada, intentaré trasladar este blog a la página y así podré tener todo esto mucho más actualizado.
La nueva era tecnológica que nos engloba, amenaza con destruir la literatura en formato tradicional. Amenaza que se puede analizar desde diversas posturas. Por un lado el usuario de un e-book, tiene a su disposición ventajas que la literatura en formato tradicional no puede ofrecerle. La descarga de libros prácticamente sin limitación reporta dos ventajas para el usuario: Por un lado la accesibilidad a un volumen de libros inmenso, inaccesible para cualquier persona que se planteara comprar cada uno de los ejemplares de los libros escogidos y también aunque a veces no se valore cómo se debiera, la cantidad de espacio a la hora de guardar los libros que se ahorra es muy significativo; Por encima de esas dos valoraciones, existen otro tipo de aspectos que son fundamentales. El mundo digital ciertamente avanza de forma vertiginosa, a un ritmo imparable. Lo tradicional suele estar estático y suele ser presa de un problemático inmovilismo que lo condena al ostracismo.
Considero que las nuevas tecnologías deben seguir avanzando, sin desterrar las costumbres tradicionales y sin vejar los derechos del creador de las historias que dan vida a esos libros. Por tanto, deberían regularse los aranceles que se pagan a los escritores y rebajar porcentualmente los honorarios de todos los intermediarios que intervienen en la producción del libro. En el caso de los libros electrónicos, desconozco el porcentaje para el escritor, pero teniendo en cuenta que la descarga, según tengo entendido, es gratuita, la respuesta es obvia. No creo que sea justo. Escribir un libro requiere de un trabajo y una entrega que debería ser mucho más valorada.
Buenos días a todos:
Mientras perfilo lo que será mi próximo artículo que colgaré en este pequeño blog, me gustaría hacer una pequeña síntesis de los contenidos que iré colgando en las próximas fechas. En un principio mi próximo artículo versará sobre la posible extinción de la literatura tradicional subyugada por la aparición de libros electrónicos y mi particular opinión sobre dicho tema. En otro artículo introduciré mis cinco libros favoritos y los que sin entrar en ese elenco, son de lectura recomendada y casi obligatoria.
Por último intentaré todos los viernes postear una novela fraccionada por capítulos, que espero que sea de vuestro agrado y objeto de valoración lo más objetiva posible. Las críticas siempre me harán mejorar mi estilo.
Voy a crear un grupo en el facebook con el mismo contenido que el bloc, así aquellos que tenga más facilidad para entrar en facebook que en este blog, podrán participar desde allí, pues tendrá los mismos contenidos.
Gracias a todos y espero vuestras visitas y aportaciones. Un saludo.
En una era tecnologica en la que la literatura tradicional camina hacia la extinción. Es casi obligatorio reciclarse y adaptarse a las nuevas tendencias. Este formato digital de autopromoción y explotación de vivencias es tan novedoso para mi, que creo que voy a tardar mucho en conseguir obtener un nivel óptimo en el desarrollo de este blog. Por ello y agradeciendo de antemano toda la colaboración que pueda obtener, me gustaría pedir a todas las personas que me acompañen en este proceso toda la ayuda que les sea posible, a través de sugerencias y consejos.
La primera imagen que he colgado, era supuestamente la portada de la primera novela que iba a sacar a la venta, he elegido esa imagen pues de esta frustrada aventura es donde proviene el nombre que le he querido dar a este blog: " Que nadie apague mi literatura". Esta frustrada aventura me ha hecho toparme con los buitres más carroñeros que pueden campear por el mundo literario. Personas que se aprovechan de la precariedad de recursos y oportunidades que tienen los escritores noveles. Momento que aprovechan para ofrecer multitud de oportunidades que se esfuman nada más entregas el dinero, que se supone va a financiar los costes de la editación, maquetación e impresión. El resultado final suele ser, por desgracia, trabajos inacados, interminables esperas y desagradables e inexplicables contratiempos que terminan cansando al crédulo escritor. Por desgracia he sido víctima de uno de estos engaños. Lo cual no es óbice para pensar que voy a dejar de escribir o que la literatura que fluye por mis venas vaya erradicarse de alguna manera. Más bien al contrario, quizás este varapalo haya servido para remontar el vuelo con mas fuerzas. Emprender nuevos y antiguos proyectos con energía renovadas y sobre todo con más experiencia. Lo cual espero que sirva, para mejorar mi forma de escribir y le den más solidez y verosimilitud a mis historias.
La primera imagen que he colgado, era supuestamente la portada de la primera novela que iba a sacar a la venta, he elegido esa imagen pues de esta frustrada aventura es donde proviene el nombre que le he querido dar a este blog: " Que nadie apague mi literatura". Esta frustrada aventura me ha hecho toparme con los buitres más carroñeros que pueden campear por el mundo literario. Personas que se aprovechan de la precariedad de recursos y oportunidades que tienen los escritores noveles. Momento que aprovechan para ofrecer multitud de oportunidades que se esfuman nada más entregas el dinero, que se supone va a financiar los costes de la editación, maquetación e impresión. El resultado final suele ser, por desgracia, trabajos inacados, interminables esperas y desagradables e inexplicables contratiempos que terminan cansando al crédulo escritor. Por desgracia he sido víctima de uno de estos engaños. Lo cual no es óbice para pensar que voy a dejar de escribir o que la literatura que fluye por mis venas vaya erradicarse de alguna manera. Más bien al contrario, quizás este varapalo haya servido para remontar el vuelo con mas fuerzas. Emprender nuevos y antiguos proyectos con energía renovadas y sobre todo con más experiencia. Lo cual espero que sirva, para mejorar mi forma de escribir y le den más solidez y verosimilitud a mis historias.
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